Entre libros y sonrisas
anoto estas crujientes Orejas,
y al comerlas me doy cuenta
de la gran riqueza
que aporta la experiencia.
Son con vino blanco
y vienen desde Viveiro,
a tu salud... un Ribeiro.
Para empezar el Carnaval
es un tentempié genial.
Orejas de Carnaval con Vino
Cocinera: La Sra. Raimunda
Puerto Base: Viveiro (Lugo)
Víveres:
@ 3 huevos
@ 200 ml. de vino blanco
@ 2 cucharadas de mantequilla (unos 100 grs.)
@ Raspa de un limón y una pizca de sal.
@ Harina: La que admita (Unos 600 grs.)
@ Azúcar para espolvorear.
A Navegar!:
@ En primer lugar, saca los huevos y la mantequilla de la nevera... a templar. Mientras se ambienta la mantequilla puedes ir buscando el disfraz.
@ Echa los huevos, el vino, la mantequilla y la raspa en un recipiente y bate bien, a ritmo de samba. Cuando los líquidos ya estén bien mezclados, vas añadiendo poco a poco la harina y revolviendo, como si de una comparsa disfrutaras.
@ Aunque te parezca que la masa nunca se va a despegar de las manos... ni caso... tú sigue amasando y vas viendo como se hace consistente; tienes que pillar el punto en que sea lo más blandita posible y que la puedas trabajar ¿Ya está? Bien, pues... a estirar...
@ Donde la vayas a estirar, echa un aire de harina o de mantequilla, imagínate que estás en la guerra de harina de Xinzo de Limia. Con un rodillo la estiras primero, ahora la cortas en cuadrados, bueno, a veces quedan rectángulos, círculos y otras formas que no tienen nada que ver con orejas pero que están igual de buenas.
@ Unas vueltas al sambodromo.... llévalas de la mesa a la sartén, durante el trayecto, una a una y con las manos las vuelves a estirar (casi se estiran ellas solas... vaya masa tan suave), cuanto más finas, más crujientes. Fríelas en una sartén con aceite de oliva y a fuego medio, en mi vitro, del 1 al 6, pongo el 4. Si hace falta vas añadiendo más aceite.
@ Y ahora simplemente ponte a freir, vuelta y vuelta, un poco tostada pero sin quemar, y si no te quieres salpicar... ponte el antifaz. Al sacarlas, espolvorea azúcar por encima, mmmm..... como se derrite....
@ Cuando las tengas hechas te darás cuenta que tienes orejas para repartir en toda la vuelta, eso si, a espalear desde una alegre y vistosa carroza acompanad@ de Don Carnal, disfrutando hasta que asome Doña Cuaresma por la puerta.
